Como mamás y papás responsables nos preocupamos porque nuestros peques consuman los nutrientes adecuados.
Los temas referentes a la estatura y al peso siempre han sido un punto clave en la alimentación de nuestros hijos, por este motivo hoy te hablaremos de qué tipo de comida puedes darle a tus niños para que tengan una buena complexión física.

El papel de los genes
Muchos padres desean que sus hijos sean unos gigantes, sin atender que el asunto de la talla es definido, en gran medida, por la genética; así que, para saber cómo será el niño en su edad adulta, es muy importante pensar en el estado físico y de salud de los padres.
Un niño con padres altos tiene garantizada una estatura superior al promedio, mientras que un niño de papás de baja estatura, no podrá alcanzar una altura superior a la de ellos; sin embargo, hay otros factores que se involucran en el aspecto de la talla: la alimentación, los microorganismos presentes en el cuerpo de los niños y el entorno.
De esta forma, la estatura de una persona se define un 80% por los genes y un 20% por los factores medioambientales.

¿Cómo crece mi hijo?
Cada niño es un universo en sí mismo, desde su nacimiento hasta su adolescencia, continuará perdiendo grasa para ganar masa muscular, no obstante debemos tomar en cuenta que los alimentos que ingiera serán claves para lograr una complexión sana, fuerte y esbelta.
El aumento del peso debe ser gradual, pero no de la misma forma se comporta la estatura, ya que mientras algunos peques adquieren centímetros extras aceleradamente, otros parece que se “estancan”.
El ritmo normal en el que un niño gana altura es, aproximadamente, de 6 a 7 centímetros por año y la cantidad de peso oscila entre los 2 a 3 kilos cada año.
Los niños dan su “máximo estirón” en la etapa de la pubertad, que comienza alrededor de los 10 años en las niñas y a los 12 en los niños, aunque puede iniciar mucho antes. Durante esta etapa, se requiere de brindar una dieta saludable a los futuros jóvenes y también propiciar un estilo de vida sano: dormir bien, hacer ejercicio, tener buenos hábitos de higiene, entre otros.

Haz que tu hijo sea un gigante saludable
Ya aportaste con tus genes el 80% del aspecto físico y de la salud que tendrá tu niño cuando sea mayor. Si consideras que eres un adulto con malos hábitos, es momento de que los cambies para que tu hijo siga el mejor ejemplo.

¿Cómo empezar? Contribuye a que tus niños consuman una dieta balanceada, rica en los siguientes nutrientes, que harán que desarrollen músculos y huesos fuertes.
Proteínas
Los músculos y los huesos se forman a partir de las proteínas presentes en nuestro cuerpo. Cuando sufrimos algún accidente y nos fracturamos un brazo, las proteínas entran en acción, pues también se encargan de reparar los tejidos.
Los aminoácidos que estimulan la hormona del crecimiento son arginina, lisina, tirosina y el triptófano. Se encuentran en alimentos como en el pollo, los huevos y los lácteos.

Vitaminas
Además de otorgar la energía que el cuerpo necesita, contribuyen al buen funcionamiento celular y el desarrollo adecuado de los músculos. Los alimentos ricos en vitaminas son los cítricos, las verduras, las carnes, especialmente las rojas y las de pescado, los lácteos como el queso, la leche y el yogurt.

Minerales
La función principal de los minerales es actuar como intermediarios entre las células y nuestro cerebro para pedir que se lleve a cabo una acción fundamental para nuestro cuerpo.
Los minerales relacionados con favorecer el crecimiento son el calcio, el fósforo y el hierro, los cuales se pueden encontrar en los lácteos, las legumbres, las carnes, las verduras verdes, los cereales y las semillas.

Carbohidratos
Son los azúcares, fibras y almidones que proporcionan energía inmediata y de almacén al cuerpo. Reciben su nombre por la presencia de carbono, hidrógeno y oxígeno, y se encuentran en las frutas y verduras, como la papa y el maíz.
Grasas insaturadas
También denominadas como grasas “buenas” son esenciales para reducir los niveles del colesterol “malo” (Lipoproteínas de baja densidad), y por consiguiente, prevenir enfermedades cardiovasculares. Generalmente se encuentran en los frutos secos, las semillas, los aceites vegetales y las margarinas.

Agua
Y por supuesto no podía quedar fuera el “líquido vital”. Los grandes beneficios del agua son contribuir a la correcta hidratación del cuerpo, nivelar la temperatura, ayudar a la digestión e incluso mejorar el sistema inmunológico.
Entre más atención pongas en inculcar hábitos alimenticios sanos en tus hijos, con la inclusión de una dieta balanceada, mayor probabilidad tendrán de crecer como un adulto sano, sin tanta predisposición a enfermedades relacionadas con el peso como la obesidad, la diabetes y la presión arterial.
@Pipochos
Fuentes
https://www.muyinteresante.es/salud/articulo/los-genes-de-la-estatura-humana
https://kidshealth.org/es/kids/growing-up-normal-esp.html
https://www.clinicasanjose.cl/clinica_sanjose/los-10-beneficios-del-agua-para-nuestra-salud