¿Has notado que tu hijo no va con la misma emoción a la escuela o pone pretextos para no asistir?. Podríamos pensar que es por flojera o por capricho, pero estas podrían ser las verdaderas razones.
Actualmente muchos niños sufren de “Bullying” o acoso escolar y es un problema más grave de lo que imaginamos, que incluso los lleva a evitar ir a clases para que no los molesten. Generalmente este tipo de abusos son dentro del mismo salón o en el patio de la escuela.
El Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) lo define como:
“Niñas, niños y adolescentes son agresores o víctimas de acoso escolar (o bullying) en primarias y secundarias, que se manifiesta con agresiones psicológicas, verbales o físicas, hacia una persona en particular.”
Según psicólogos no sólo hablamos de golpes, si no de gritos, insultos o la exclusión por un grupo de compañeros con el propósito humillar cuando otras personas están viendo. Actualmente gracias a las redes sociales los niños aún en su casa lo sufren.
Si tu hijo se enferma justo el domingo por la noche o el lunes en la mañana, con síntomas diarrea, dolor de estomago, cólicos o dolor de cabeza, seguramente está evitando la escuela y con ello el abuso.
Parte importante del crecimiento de este problema es la falta de atención de las autoridades o de los profesores. “La violencia se origina en el mundo adulto” y por lo general los niños aprenden de lo que ven o de lo que escuchan en casa.
La clave para ayudar prevenir es la comunicación en familia. Preguntar si pasa algo, si hay cambios repentinos en su salud y cómo se les puede ayudar. Como niños tienden a esconder cosas, pero es importante hablar con ellos para prevenir acciones desesperadas o para ayudarlos a salir adelante de este problema.
No lo dejes pasar. ¡Puede ser peligroso!
Fuente.- http://www.imss.gob.mx/salud-en-linea/acoso-escolar