¿Recuerdas en tu infancia algún evento catastrófico que haya sucedido cerca de tu casa? Si tu respuesta es sí, tienes mucho a tu favor para ayudar a tus pipochos; si tu respuesta es no, aquí te ayudamos con unos tips para abordar el tema con tus niños.
Resulta increíble que los menores de cinco años son indiferentes a los desastres naturales, ya que aún no toman conciencia del mundo que les rodea, en cambio, los niños de primaria pueden presentar trastornos de estrés ante estos eventos. Es importante que los adultos sepan reaccionar debidamente ante estas situaciones, pues cualquier alteración emocional será notada por los menores y, por lo tanto, se convertirá en un evento que también a ellos les preocupará.
El pasado terremoto del 19 de septiembre, en México, varios padres de familia se alteraron ante esta situación, muchas madres salieron gritando de sus casas y al acudir por sus hijos a la escuela llegaron rompiendo en llanto. Es importante controlar estas emociones negativas, porque no ayudan en nada a tranquilizar a los pequeños.
Guarda la calma y utiliza palabras entendibles
La primera recomendación es guardar la calma ante cualquier desastre natural. Todos debemos estar preparados, por ello, debemos explicar a los pipochos la situación que está ocurriendo o que ocurrirá, y la manera en que debe cuidarse tu pequeño. Evita mostrarte angustiado en tu explicación y utiliza palabras entendibles; mientras platicas con él puedes preparar su maleta contra riesgos.
Si tu pipocho no entiende de lo que le hablas, trata de no ahondar en el tema, pero si lo ves intranquilo trata de hablar con él, si se encuentra indispuesto jueguen y dibujen juntos, para que tenga la confianza de exponerte sus dudas y temores.
Inspírale seguridad
Si el evento catastrófico ya ha sucedido, lo que debes hacer es fomentarle seguridad, explicarle que muchos desastres naturales son impredecibles, pero que en ese momento tú y toda su familia están con él para apoyarlo. Sin embargo, no debemos mentirles ni pedirles que sean fuertes o se pongan alegres, debe aclararse que es normal sentir tristeza, porque otras personas están sufriendo, o sentir miedo por lo desconocido.
Evita escuchar las noticias todo el día o hablar del tema todo el tiempo, esto sólo causa tensión nerviosa en el hogar. Es probable que tu pequeño te pregunte varias veces el mismo tema, así que no desesperes y explícale con cariño lo ocurrido.
Apoya a los damnificados
Lo que nunca debes hacer es llevarlo a la zona devastada, pues esto lo asustará, sin embargo, pueden mandar asistencia a los afectados, la sensación de estar apoyando a las personas ayuda mucho a superar la ansiedad y los sentimientos de impotencia. Pueden hacer un dibujo juntos o mandar un mensaje, en la ayuda que estén enviando.
Observa su comportamiento
Días después de lo ocurrido, presta atención al comportamiento de tu pipocho, si quiere llorar permíteselo, otros podrán estar callados cuando suelen ser muy activos o viceversa. No hay mejor remedio que un abrazo, pero si semanas después tu pequeño siente miedo de dormir solo, o comienza a morderse los labios, las uñas o a rascarse sin motivo alguno, llévalo con un especialista.